Hola, hoy os hablaré de los Frutos secos.
Los frutos secos como las nueces, avellanas, piñones entre otros son considerados alimentos altamente energéticos y su grasa es saludable.
Sin embargo, incluir muchos frutos secos en la dieta puede resultar contraproducente principalmente para una persona que desea adelgazar, ya que puede representar una forma rápida de ganar peso.
Propiedades nutritivas de los frutos secos
Los frutos secos, como su nombre lo indica, son pobres en agua, pero se consideran una rica fuente de carbohidratos complejos. Su contenido, por lo general, se compone de ácidos grasos mono y polinsaturados que son “grasas” que se metabolizan con facilidad. Además, contienen vitamina E, el cual es un antioxidante que combate los llamados radicales libres (producto negativo).
Si se mezclan con cereales, da como resultado una proteína de alta calidad; ideal para los niños que se encuentran en proceso de crecimiento.
Piñones Este fruto seco usualmente se recoge en los bosques y, por ello, no contiene plaguicida. Se recomienda guardar los piñones en la nevera para evitar que se pongan rancios rápidamente. En cuanto al aspecto nutricional, el consumo de100 gramos crudos representan 678 Kcal. Además, es rico en calcio y magnesio lo cual representa una buena alternativa o complemento a los lácteos.
Cacahuates Este fruto seco es una fuente de proteínas (50 gramos cubren la cuarta parte de las necesidades diarias) e, igualmente, posee vitamina B3 y ácido fólíco. Se aconseja consumirlos en pequeñas cantidades porque, no sólo son calóricos, sino que producen alergias a muchas personas.
Avellanas Las avellanas contienen más grasas monoínsaturadas que el aceite de oliva y, además, contiene manganeso, esencial en periodos de esfuerzo físico y mental.
Son, como toda fruta seca, muy calórica, ya que 100 gramos de avellanas crudas representan 650 kcal. Muchas personas muelen este fruto seco y elaboran una bebida (leche de avellana) la cual resulta muy nutritiva y una opción para las personas que sufren de intolerancia a la lactosa.
Almendra Posee una larga lista de nutrientes como vitamina E, calcio, potasio, hierro y fósforo. Por ello, se aconseja incluir tres o cuatro almendras en la dieta principalmente en el caso de los niños y de las personas de la tercera edad.
Nueces Las nueces contiene gran cantidad de ácidos grasos omega 3 y omega 6 y vitamina E. En cuanto a su cantidad de calorías, es de 510 por100 gramos.
Propiedades curativas y remedios con frutos secos
En cuanto a sus propiedades curativas, los frutos secos no sólo ayudan al organismo en la realización adecuada de sus funciones sino que previenen y hasta alivian ciertas dolencias.
Las nueces, por ejemplo, se consideran como fuente de fitoestrógenos lo cual reduce los efectos de la menopausia principalmente los sofocos propios de las mujeres en esta etapa. Igualmente, contienen fitoesteroles, sustancias que se parecen al colesterol, pero que son de origen vegetal y que ayudan a disminuir los niveles de colesterol en sangre lo que brinda un beneficio cardiovascular.
En Latinoamérica se cuenta con la pepita de marañón; un fruto seco que, además de su contenido de ácidos grasos, contiene también minerales, fósforo, potasio, zinc y magnesio. Su consumo facilita la absorción del calcio y, por ello, es muy apreciado por las personas que sufren de osteoporosis.
Las personas con anemias encontrarán en los piñones unos buenos aliados, ya que aportan hierro. Lo mejor es comerlos al natural para aprovechar sus propiedades.
En cuanto a la avellanas, se recomienda consumir30 gramos diarios para reducir el riesgo de desarrollar arteriosclerosis y enfermedades cardiacas; esto debido a los olígoelementos que contienen
La almendra resulta una buena aliada contra el estreñimiento, ya que es el fruto seco que más fibra contiene. Además, por sus ácidos grasos monoinsaturados disminuye el colesterol malo lo cual beneficia a las personas con afecciones de corazón
Recetas saludables con frutos secos
Pescado en salsa de almendras
Ingredientes:
1 1/2 kg de pescado blanco (merluza, lubina o cualquier otro, siempre que no tenga muchas raspas).
1/2 cebolla.
1 hoja de laurel.
1/2 limón.
50 g de miga de pan.
1 vaso de agua muy fría.
100 g de almendras peladas o molidas.
Sal y pimienta.
1/2 di de aceite de oliva.
Preparación:
Se lava el pescado y se le quitan escamas y aletas. Se cuece entero en un recipiente tipo besuguera con la media cebolla, la hoja de laurel, sal y pimienta en grano. Aparte, en la batidora o mortero grande se pican las almendras peladas (si no las tenemos molidas) y la miga de pan mojada, se agrega el aceite de oliva poco a poco como si fuera una mayonesa, es decir, removiendo con un tenedor o cuchara de manera regular.
Si se utiliza batidora, habrá que elaborarlo también en dos o tres veces para que no se corte. Se añade, poco a poco, el zumo del medio limón así como sal y un poco de pimienta. Se diluye esta salsa con el agua fría, procurando que quede espesa la salsa de almendras. Se saca el pescado de la besuguera o recipiente similar, de manera que no se rompa, y se le quita la raspa central. Se extiende sobre el mismo la salsa de almendras y se adorna la fuente con rodajas de limón y de tomate. Se mete en el frigorífico hasta el momento de llevar a la mesa, ya que es un plato típicamente veraniego
Postre frío de avellanas
(ingredientes para seis personas)
720 g de avellanas peladas y tostadas
6 yemas de huevo
160 g de azúcar
250 g de leche
150 g de miel
Para decorar nata montada
Preparación
Triturar y reducir a polvo las avellanas. En un recipiente resistente al calor batir durante 15 minutos el azúcar con las yemas.
Añadir la leche y calentar el preparado al baño María, removiendo hasta obtener una espuma densa y homogénea. Retirar del fuego, dejar enfriar y luego incorporar la nata montada.
Humedecer con agua fría el interior de un molde, verterle el preparado y meter en el congelador durante 2-3 horas.
Transcurrido el tiempo de reposo, calentar un poco la miel en un cazo a fuego muy suave y extenderla en el fondo de la fuente de servir. Desmoldar el postre frío y colocarlo en la fuente.
Cortarlo en rodajas de 1 cm y 1/2 de espesor aproximadamente, decorar a voluntad con nata montada y avellanas enteras y servir.
Recomendaciones
Los frutos secos son muy versátiles. Para aprovechar sus beneficios al máximo puedes comerlos entre horas, pero también incorporarlos en tus platos
En tus ensaladas aportan sabor y un toque crujiente. Añade un puñadito de piñones tostados en una ensalada de berros o de espinacas.
En sofritos y salsas, piñones, almendras y avellanas quedan especialmente bien, mejorando su textura y también su sabor.
Incorpóralos a tus rebozados. Pica un puñadito (unos 10 gramos) bien fino y añádelo al final del proceso del rebozado. De esta manera obtendrás una costra muy sabrosa.
Ingredientes de rellenos. Mejora tus recetas utilizando frutos secos como las nueces de macadamia, los anacardos, los pistachos o unas avellanas como relleno de carnes blancas como el pollo o el pavo.
Un toque en tus postres. Puedes añadirlos en cantidades pequeñas a lácteos como el yogur desnatado, la cuajada o el requesón, y a las macedonias de frutas de temporada.
La cantidad ideal Una ración de frutos secos equivale a 25 gramos (sin cáscara). Esto son unas 6 o 7 nueces o unas 10 almendras, avellanas o pistachos