jueves, 7 de junio de 2018

ABEDUL PARA LA CELULITIS, ADELGAZAR Y DEMAS

Hola hoy os hablaré del ABEDUL. 

El abedul blanco puede llegar a medir 22 metros de altura y abunda principalmente en el norte de Estados Unidos, Canadá y el norte de Europa.

Su corteza es blanca y sus hojas de color verde claro están cubiertas de una fina pelusa. Sus hojas son ovaladas, puntiagudas y se alternan en parejas.En cuanto a sus flores, éstas son pequeñas y verdosas, reunidas en característicos amentos colgantes, unos masculinos y otros femeninos.De estos últimos madurarán los frutos en verano, diminutos y con una sola semilla, que se dispersará por el aire gracias a sus alas laterales

Es importante observar que existen otras especias de abedul (alrededor de 40), todas ellas con las mismas propiedades, siendo las más conocidas la péndula, la laciniata, la pubescens, la carpathica, la alpestris, la carpinifolia, la fructicosa, la glandulosa, etc., así como infinidad de híbridos de las mismas.

Todas las especies contiene una substancia de color gris obscuro que es la llamada “brea de abedul” y una esencia que sólo se produce cuando al humedecer la corteza desmenuzada se favorece la acción de un fermento, la “betulosa”, sobre la gaulterina que es isómera con el salicilato de metilo
Aunque es un árbol muy empleado por su madera desde épocas remotas, no es hasta la Edad Media que se descubre  sus propiedades curativas.  Santa Hildegarda recomendaba el uso de las flores de abedul para las heridas y úlceras rebeldes.

Mattiolo, gran médico del Renacimiento, señalaba que usaba el agua que salía del tronco del abedul para eliminar las piedras tanto de los ríñones como de la vejiga.  Por ello, recibía el nombre del «árbol nefrítico de Europa». Igualmente, mencionaba que esta agua aclaraba las manchas del rostro y hermosea la piel, y combatía úlceras de la boca.

 Propiedades curativas

Desde el punto de vista de la medicina natural, el abedul es un árbol muy completo, ya que se puede aprovechar casi todo de él (hojas, yemas, savia, corteza, e incluso la madera, que en forma de carbón sirve de antiséptico) con fines curativos.

Las hojas, astringentes y de sabor amargo, del abedul son apreciadas por sus propiedades diuréticas. Por esa razón, resulta ideal, como ingrediente en remedios para reducir el tamaño de las piedras del riñón y aliviar los cólicos nefríticos, gota, reumatismos,  retención de liquidos, entre otros.

De forma externa, la infusión de sus hojas o la cocción de su corteza se emplea en baños para el tratamiento de las enfermedades cutáneas como el eccemas,  rosácea, herpes,psoriasis, acné, forúnculos, eritemas, etc.

Las yemas son útiles en las afecciones del hígado y la vesícula biliar, mientras que la corteza, tanto en infusión, como la brea que se obtiene mediante su destilación, se utiliza como febrífuga, especialmente contra la gripe  y las fiebres intermitentes. Por último, la savia, que se obtiene de incisiones realizads en las ramas, se usa como diurética, tanto fresca como fermentada.

Remedios populares

Para el acné y los forúnculos: 

Hervir 1 litro de agua; bajar el fuego; añadir 3 cucharadas de corteza seca de abedul.  Cubrir y dejar hervir durante 10 minutos a fuego lento. Después, retirar la corteza del fuego y dejar en reposo por 1 hora, Colar la solución y humedecer una tela de muselina limpia, exprimir ligeramente y aplicar en la parte afectada para hacer una buena cataplasma.

Para heridas y llagas:

 Mezclar 8 cucharadas de polvo o trozos de corteza de abedul en medio litro de alcohol. Agitar diariamente, permitiendo que la corteza se extracten durante unas dos semanas. Dejar que los materiales se asienten y verter la tintura en un recipiente, pasándola por un colador o un paño fino. Aplicar tantas veces como sea necesario.

Contra la retención de líquidos 

Verter un litro de agua hirviendo sobre 50 g de hojas.  Tapar, dejar refrescar y filtrar. Beber 4 tazas al día, alejadas de las comidas.

Para llagas en la boca o irritación de la garganta

 Hervir por 10 minutos 100 g de hojas de abedul en un litro de agua y colar.  Usar esta preparación en buches o gargarismos varias veces al día.

Para la celulitis: Verter 5 gotas de aceite de abedul en las manos y luego frotar con fuerza por 10 minutos las zonas que presentan celulitis.  Realizar este remedio a diario con el fin de activar tanto la circulación de la zona como la movilización de las grasas subcutáneas depositadas responsables de la formación de la  celulitis. 

Para adelgazar 

Tomar 2 veces al día 1 vaso de  agua de abedul. También  se puede lograr la pérdida de peso mediante el consumo de infusión de las hojas de abedul 2 veces al día.

Para la vesícula

Hervir por 10 minutos 100 g de yemas de abedul y 1 gramo de  bicarbonato  en un litro de agua. Beber 3 tazas diarias, alejadas de las comidas.

Para las piedras del riñón: 

Hacer un cocimiento de hojas de abedul tomarlo tres veces al día. en la proporción de 10 gramos de hojas para 100 de agua.  Este remedio favorece la disolución de los cálculos urinarios e impide su formación, debido a su acción diurética.

Para el reumatismo 

Hervir 1 puñado de hojas de abedul en 1 litro de agua por 10 minutos.  Pasado ese tiempo, tapar y dejar refrescar.  Verter en una bañera con agua caliente. Tomar un baño no mayor de 15 minutos.

Para las hemorroides Mezclar 20 gr de ginkgo biloba, 25 gr de rusco, 20 gr de hamamelis, 20 gr de vid y 15 gr de abedul y extraer una cucharadita de ésta.  Verter en una taza de agua que esté hirviendo.  Beber 2 tazas al día. Esta infusion es aún más efectiva si se le añaden al final 40 gotas de extracto de castaño de India

Para la próstata inflamada:

 Verter  en un litro de agua que esté hirviendo 15 gramos de  corteza de abedul.  Tapar y dejar refrescar. Beber esta decocción, un máximo de 5 tazas diarias.

Espero que os ayude 

Cuidaros 

Hasta luego. 

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